En Bepensa y Fundación Bepensa estamos comprometidos con el bienestar y la salud de las personas que viven en las comunidades donde tenemos presencia, y es por ello que contamos con programas permanentes de activación física.
Los distintos niveles de gobierno, empresas y parte de la ciudadanía han decidido suspender operaciones no esenciales y trabajar desde casa -en la medida de lo posible- ante la pandemia del COVID-19. Las medidas también llegan a las escuelas. La Secretaría de Educación Pública suspendió clases hasta el 30 de abril.
En los últimos días, el gobierno federal ha sido enfático en el llamado a la población de quedarse en casa para evitar la propagación del COVID-19. Trabajar desde casa implica una serie de retos; entre ellos, un especial cuidado en el manejo de los residuos. Ahora, más que nunca, su correcta separación es de vital importancia tanto para su aprovechamiento, como para disminuir el riesgo de contagios en quienes tienen contacto directo con nuestros residuos.
Una persona genera aproximadamente 1.026 kilogramos de residuos al día y se estima que diario, en el país, se recolectan 122,605 toneladas de residuos sólidos urbanos. Sin embargo, apenas el 44% de la población separa sus residuos en el hogar, de acuerdo con datos de INEGI, Sedesol y Ecología y Compromiso Empresarial (ECOCE), asociación ambiental sin fines de lucro.
“Por más sencillo que parezca, con tirar la basura en su lugar y separar los residuos correctamente, estamos contribuyendo a hacer frente a esta pandemia”, comentó Jorge Treviño, director general de ECOCE.
Tradicionalmente, existen tres categorías para separar los residuos en nuestro hogar:
- Orgánicos, que son los deshechos de comida, cascarones de huevos, flores, residuos de frutas, entre otros.
- Inorgánicos reciclables, por ejemplo, envases de cartón, vidrio, PET y otros plásticos, hojalata y envases de cartón laminado (tetrapack).
- Inorgánicos no reciclables, como unicel, bolígrafos, chicles, pañales y pañuelos desechables.
Sin embargo, estos tiempos extraordinarios requieren medidas especiales. ECOCE recomienda para esta contingencia:
- Vaciar y lavar bien los residuos inorgánicos reciclables, antes de separarlos en su bote.
- Considerar un bote adicional para residuos sanitarios.
- Asegurarnos de cerrar e identificar muy bien las bolsas donde depositemos nuestros residuos.
- Identificar cada bolsa con un marcador o etiqueta de acuerdo al tipo de residuos que contiene y su clasificación.
- Tanto los residuos orgánicos como los inorgánicos no reciclables sanitarios, como pañuelos desechables y material higiénico, deben ir -cada uno- en bolsas selladas.
- Recubrir la bolsa de residuos sanitarios con otra bolsa para aislarla aún más.
- Desinfectar el exterior de las bolsas con agua clorada. Para preparar una solución desinfectante, se recomienda mezclar cuatro cucharadas de cloro doméstico por cada litro de agua.
- Si tenemos sospecha de que alguien en nuestra casa esté infectado por el COVID-19 o haya salido positivo en la prueba, guardar las bolsas de residuos en nuestra casa por 72 horas antes de sacarlas a la calle o entregarlas al camión de basura.
Separar adecuadamente los residuos permitirá disminuir el volumen de nuestra basura y evitar la propagación del COVID-19.
Educación: siempre es importante
Estos días de aislamiento voluntario se pueden aprovechar también para enseñar a nuestros hijos cómo separar y manejar correctamente nuestros residuos y cultura ambiental. La educación es uno de los pilares que tiene ECOCE, por ello se puso en marcha este año la plataforma educativa gratuita: Educa Verde Eco-Reto.
La plataforma tiene la meta de estar presente en 250,000 escuelas de preescolar, primaria, secundaria y preparatoria de todo el país, para apoyar con la educación ambiental, cuidado del medio ambiente, correcta separación de residuos, así como disminuir la contaminación en nuestros ecosistemas.
ECOCE, desde el 2002, facilita el acopio y reciclaje de materiales como PET, aluminio, cartón laminado, polietileno de alta y baja densidad, vidrio, hojalata, entre otros. Además, ayuda a vincular a actores y contribuye a la educación ambiental.
En Bepensa, como parte de ECOCE y la Industria Mexicana de Coca Cola, estamos constantemente realizando acciones que motiven e inspiren a un pensamiento más ecológico por la conservación de nuestro planeta.